miércoles, 14 de septiembre de 2016

Frases, anécdotas y surrealismos varios que suceden en una clase con adolescentes. Parte 2

Después de la bonita acogida que tuvo la parte 1 de las frases, anécdotas y surrealismos varios de una clase con adolescentes, vuelvo con la segunda y última parte de este primer volumen. Creo, que es mejor incluso que la entrada anterior.

Parte II de II

Intentaba explicarle una cosa a un alumno, pero no había manera. A la cuarta o a la quinta vez, le pregunto:
Sandra: ¿Lo entiendes ahora?
Alumno: Es como si le explicaras a un burro.
Pobrecito mío.

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Mientras estaba en clase con unos pocos alumnos, había uno que no paraba de decir burradas. Mientras, en la clase de al lado, había un grupo de adultos haciendo un curso. Como el alumno estaba diciendo muchas tonterías le dije:
Sandra: No digas esas cosas que hay gente en la clase de al lado y te oyen.
Alumno: ¿No saben que esto es un colegio de gente rara?
Lo peor de todo es que él se incluye en el pack.

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Probablemente esta sea la conversación más habitual en una clase a las 9 de la mañana. 
Alumno: ¡Profe qué sueño tengo!
Sandra: ¿Qué te piensas que yo no tengo sueño?
Alumno: Eso es mentira, los profes no dormís.
Los profes no dormimos, los profes sólo piensan en como fastidiar a sus alumnos, los profes vivimos muy bien.

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Un día, en una conversación cualquiera.
Alumno: Vamos a cambiar de tema. ¿Profe tú tienes seguro de casa?
Profe: Sí
A: ¿Y de coche?
P: Sí.
A: ¿Y de vida?
P: Sí. ¿ Alumno me estás vendiendo un seguro?
A: Sí.
El alumno tenía una vecina que vendía seguros y le dijo que si le conseguía clientes le daría un dinerillo. Cosas del barrio.

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Nada más entrar en clase un alumno me pregunta si puede merendar. Aunque le digo que no, automáticamente saca una bolsa de queso rallado y empieza a comer.  
¿?¿?¿?

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Conversaciones entre alumnos.
Alumno 1: Yo me apunté a judo para defenderme de los que se metían conmigo.
Alumno 2: ¿Y no podías haber hecho cupcakes?
La cocina también puede quitar tensiones.

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Alumno: Yo creo que esta clase debería darse de ejemplo para los niños. Los traéis aquí y les decís "esto es lo que no tenéis que hacer".
Tampoco sois tan malos...

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Un día llegué antes y aparqué justo en frente de un banco donde había varios alumnos sentados esperando a que abriéramos. En vez de ir para clase, me fui en dirección contraria para ir a comprar unas cosas que necesitaba.
Alumno: ¿Profe donde vas?
Sandra: ¿A ti que te importa?
Alumno: ¿Quieres que vaya contigo para que no te peguen?
Ahora que lo pienso en frío, no está mal tener influencias por si las moscas.

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Hablando de mal de amores con los alumnos, uno de ellos tuvo la siguiente reflexión.
Alumno: Yo no me fiaría de las mujeres.
Profe: ¿Por qué?
Alumno: Pues porque si llevas mucho tiempo con ella, te encariñas y te pueden hacer una familia.
Las mujeres, malas por naturaleza. 


Espero que os haya gustado tanto como a mí recordarlo. Espero que este año también tenga tanto material.


miércoles, 24 de agosto de 2016

Frases, anécdotas y surrealismos varios que suceden en una clase con adolescentes. Parte 1



Cuando das clase suceden una serie de situaciones, conversaciones y circunstancias que son dignas de libro. Y más, si trabajas con adolescentes. Desde que comenzó el curso en octubre han ocurrido mil anécdotas dignas de estudio… pero a mí se me ocurrió en abril empezar a apuntar todas esas conversaciones surrealistas que nos han ido sucediendo en cada una de las clases. Tenía pensado poner todas ellas en una entrada, pero me ha resultado imposible... así que:

Frases, anécdotas y surrealismos varios que suceden en una clase:

Parte I de II

Alumno: Tú cuando te enfadas no das miedo, haces gracia.
Muchas gracias, llegaré muy lejos en la enseñanza gracias a ello.

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Alumna: Profe yo dejaría a mi novio por ti.
No hay nada que decir a esto. Sí, has leído alumna, sí, me lo dijo a mí. 

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Mientras estoy dando clase o seguramente regañando a alguien o quejándome de algo un alumno me suelta.

Alumno: Profe que bien te queda esa camiseta.
Yo me quedo con cara perpleja porque no sé a qué viene eso en ese momento. Y acto seguido me dice:
Alumno: era para romper el ambiente, que está muy tenso.

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Este mismo alumno, un día también sin venir a cuenta y mientras daba clase:
Alumno: Profe tú tienes cara de trabajar en el Bershka.
Misma cara de perplejidad que en la anterior.

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Un día empecé a inventarme ejercicios de matemáticas porque al día siguiente tenían examen y había que repasar. Uno de ellos me dijo:
Alumno: ¿Profe no te da vergüenza no tener preparada la clase?
Sandra: ¿No te da vergüenza no haber hecho nada en 6 meses?
Otra alumna: Profe te falta el porrillo y las gafas a lo Thug life.
Sí, aquí me vine muy arriba.

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Alumno: Dios dame paciencia y en el culo resistencia.
Según el alumno, que es colombiano, es un dicho popular de su país porque allí es habitual dar “cachetadas” a cualquiera. No sé si alguien puede corroborarme esto...

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Un día que debía dar una clase bastante espesa de teoría, dije un comentario irónico y la respuesta que obtuve me dejó a cuadros.
Sandra: Bueno, lo dejamos aquí que habéis pensado demasiado y vuestros padres se van a quejar.
Alumno: Todo lo contrario, nuestros padres tienen que estar agradecidos porque nos hagas pensar tanto.
En estos momentos tienes dos opciones: o ponerte a llorar de emoción, o hacer ver que eso te pasa todos los días.

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Alumno: ¿Por qué no huelen los mocos? ¿Te has parado a pensarlo?
No sé que más decir. Esto no hay por donde pillarlo. 

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Conversación entre dos alumnos, obviamente mientras se daba clase.
Alumno: Tengo que comer azúcar.
Alumna: Come fruta que tiene azúcar.
Alumno: ¿ Y si tú te comes la fruta y luego te como yo a ti?
Sólo tengo que decir que éste es el mismo alumno que el de los mocos. Filosofía fina. 

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Un alumno le dijo a mi compañera lo siguiente:
Alumno: he llegado a la conclusión que aunque eres mala por naturaleza, en el fondo eres buena gente.
Puede parecer chistoso, pero no lo es cuando te lo dicen dándote la mano y mirándote a los ojos con mirada sombría. Mi compañera, alias malilla, todavía sueña por las noches.

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Conversación entre la malilla y un alumno en una de sus clases.
Alumno: Le he robado unas zapatillas a un negro y le voy a ir a quitar otras.
Profe: Pues eso no deberías hacerlo.
Alumno: ¿Qué me van a hacer? ¿Denunciarme?
Profe: Pueden perseguirte, los negros corren mucho.
Alumno: Yo también, y cuando tengo miedo más.
La supervivencia te puede salvar en más de una ocasión.

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Alumno: Somos un malware. Vamos infectando allá donde vamos.
Ellos mismos se lo dicen todo.

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Un día, estaba explicando con mucho entusiasmo matemáticas y una alumna levantó la mano.
Sandra: Dime.
Alumna: ¿Profe tú te peinas?
Obviamente NO. CUANDO TIENES EL PELO RIZADO ES COMPLICADO PEINARSE.

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Explicando las verduras en inglés:
Sandra: Pepper es pimiento en inglés.
Alumno: ¿Cómo se dice “me importa” en inglés?
Sandra: “I care”
Alumno: “I care a pepper”
Seguramente él inventó la marca Superbritánico.

Continuará...


martes, 29 de diciembre de 2015

Cosas que nunca pensé que haría en el 2015

Me gustaría pensar detenidamente qué ha sido este año para mí, qué ha significado y qué he aprendido de él. Repaso mentalmente todas las cosas que nunca pensé que haría en el 2015 y los verbos utilizados no pueden ser más sencillos y claros: cantar, bailar, comer, pasear, viajar, trabajar, descubrir y reír.

Y aquí, todas esas cosas que nunca pensé que haría en el 2015:

Comer la mejor paella del mundo en Poblenou.



Ver a Adam Levine sin camiseta en el concierto de Maroon 5 y cantar 
como posesas el She will be loved. 



Estar morena ya en julio.



Ir a Menorca y prácticar el slow-life o como no preparar nada por pereza 
o porque nos hacemos mayores.



Encontrar en Joffels un nuevo amor perruno.



Cenar en un restaurante con estrella Michelín. La foto es del segundo postre, SEGUNDO.



  Encontrar un trabajo nuevo, donde cada día tengo que estrujarme los sesos para ser más creativa, donde regaño y río a partes iguales, y donde me he dado cuenta que soy un batiburrillo de todos los profesores que un día tuve.



Participar en una mesa electoral siendo 2a suplente. Esto más bien es mala suerte.



Desconectar en el pueblo más alto del Pirineo.
Beraní y sus 6 habitantes nos hicieron pasar un finde de lujo en la montaña.



Celebrar por todo lo alto la boda de Marta y Xavi en la barra libre.
Aquí podría añadir que ese día también hablé delante de 300 personas.
Y que me tuvieron que ayudar a bajar del mini escenario de la 
ceremonia porque mi vida siempre
peligra cuando voy encima de unos tacones.

Foto de Boda & Films


Trabajar de voluntaria junto a mis alumnos en un comedor social de Bonavista.



Pasar las pre-navidades en Ámsterdam.



Darme cuenta, más aún, que gastarme el poco dinero que tengo en pasar tiempo con las personas que quiero, ya sea en cenas, viajes y en pequeños momentos del día a día, es la mejor inversión que puedo hacer en la vida.



Por un 2016 lleno de buenos recuerdos.

miércoles, 16 de diciembre de 2015

9 cosas que hacer en Menorca

Resulta que a 20 minutos en avión existe un pequeño paraíso llamado Menorca.

Lejos del bullicio que puede haber en julio y agosto; la poca explotación de la isla y que todo sea tan virgen ayuda a crear ese ambiente de tranquilidad. Para llegar a muchas de sus playas hay que andar al menos 20 minutos, algo impensable en muchas playas de las Costa Dorada. Pero, eso mismo es la esencia de esta isla: una isla donde destaca el azul y el verde por encima de todo. 

Nos plantamos un jueves en Menorca, sin prácticamente planficar nada, y dispuestas a recorrer la isla durante tres días.

Me hace especial ilusión incluir en esta crónica viajera un dibujo que ha hecho mi gran compañera de aventuras Maria. Un bonito recuerdo de todas las anécdotas del viaje.


 9 cosas que hacer en Menorca

1. Ir a alguna cala azul turquesa del sur. Cala Macarella o cala Mitjana son un gran ejemplo.



2. Ir a alguna playa roja caliza del norte y ver la puesta de sol mientras te embadurnas en barro. Llegamos a la platja cavalleria a media tarde y disfrutamos de una increíble puesta de sol.




3. Practicar el slow life. Y con esto me refiero a hacer un viaje sin prisas y sin estreses. Menorca es una isla pequeña, con una única carretera que cruza de punta a punta y en la que como máximo puedes ir a 80km/hora. Las playas son de dificil acceso y en general, la vida es tranquila. Así que es el lugar ideal para no preocuparse por verlo todo y disfrutar de los planes espontáneos. 




4. Comprar una GoPro cámara sumergible deshechable en Amazon y hacer el idiota en el agua.




5. Perderse en las fiestas de alguno de sus pueblos. Volviendo de la puesta de sol de la platja de Cavalleria pasamos por Es Mercadal y nos atrajeron sus luces en las calles y sus banderitas de colores. Hechas un desastre, llenas de barro y arena, no pudimos evitar hacer un alto en el camino y recorrer sus calles iluminadas.



6. Alquilar un kayak y luchar para que no te lleve la corriente. Muy importante coger la cámara deshechable en la que sólo quedan dos fotos (teniendo otra cámara sin estrenar) y poner un dedo en el objetivo mientras haces una de las fotos. Perdón por la no calidad de estas imágenes...



 7. Visitar uno de sus siete faros. Especialmente, el far de Favàritx.



8. Ver el atardecer desde las Covas d'en Xoroi.



9. Perderderse en el puerto de Ciutadella.


 9+1. Empezar a pensar en el próximo viaje.

lunes, 5 de octubre de 2015

Estaba pensando...




Estaba pensando que me podías dar un beso de esos que a veces me das,
de esos que me dejan un poco tonta y con ganas de más. 

Quizás, podríamos ir a cenar a aquel sitio donde fuimos cuando nos conocimos.
 Prometo que esta vez invito yo. Y que te dejo elegir a ti.

¿Qué te parece si después vamos a nuestra heladería favorita?
Esa que está lo suficientemente cerca,
pero lo suficientemente lejos del bullicio ese que odiamos. 

Luego podríamos dar un paseo, y al cabo del rato darnos cuenta que hemos
andado demasiado y que aún tenemos que volver. 

Vayamos a casa y hablemos en la cama hasta las tantas. 
Los dos trabajamos mañana, pero ¿qué más da? 

Hablemos de sueños y esperanzas, de decepciones, preocupaciones y alegrías,
un poco del pasado y mucho del futuro.

Seguramente se me escape que he estado buscando vuelos a aquel lugar que hablamos el otro día.
¿No hablamos de sueños? Pues hagámoslos realidad.

Ten en cuenta que cuando durmamos, te quitaré todas las sábanas.
También hay altas probabilidades de que te arrincone en una esquina.  

Abrázame mientras duerma, porque a veces lo necesito.

No te pido que te quedes a mi lado para siempre, yo no hago esas cosas,
pero no estaría nada mal que lo hicieras.