Después de un par de horas de autobús llegamos a Granada sobre las 9 de las noche. Pasamos dos noches en la pensión Recogidas, en pleno centro de la ciudad. Al llegar tan tarde y al estar literalmente muertas cenamos algo rápido y nos fuimos a dormir... Al día siguiente nos esperaba un día intenso!
Teníamos entrada para los Palacios Nazaríes de la Alhambra a las 9:30. Esto me gustaría explicarlo bien porque es toda una odisea los accesos y las entradas en general. Las entradas las compramos por internet con un mes y medio de antelación, puede parecer exagerado pero no... Hay diferentes horarios y el número de personas que pueden entrar al día está restringido. Compramos las entradas con la oferta del Carnet Jove (menores de 30) y hay que recogerlas en cualquier ServiCaixa pero de Andalucía.
Vayamos por orden, los Palacios Nazaríes es un complejo dentro de la misma Alhambra. La entrada te permite recorrer la Alhambra durante el horario de visita (mañana o tarde) pero a los Palacios tienes que entrar sí o sí a la hora indicada. Para ir al complejo hay unos buses que te dejan en dos paradas: las taquillas de la Alhambra o en la entrada de los Palacios. Nosotras como no teníamos ni idea paramos en la segunda... ERROOOOR. Después de hacer 10 minutos de cola para los Palacios, nos dicen que al haber comprado las entradas con el descuento de Carnet Jove tenemos que pasar por taquillas para verificarlo. Teniendo en cuenta que si se te pasa la hora de entrada ya no entras... Antes de recorrer la Alhambra tranquilamente... hicimos un maratón para llegar hasta las taquillas (que estaban muy muy lejos). Ahora que lo pienso, todo muy surrealista, porque tenían que verificar que teníamos el Carnet Jove para poder entrar, pero ya estábamos dentro! Así que mientras corríamos como locas, les enseñábamos las entradas (esas que no valían) a los guardas y éstos nos iban abriendo accesos a la vez que nos decían "TRANQUILAAAAS, QUE VAIS BIEN DE TIEMPO" (léase en Andalú). En fin, llegamos a las taquillas, nos dieron las entradas y antes de volver a salir corriendo hacia los Palacios, un supuesto guía de la Alhambra nos estuvo contando un rollo bastante extenso de que por allí no había que ir con prisas. Muy irónico todo.
En fin, llegamos a tiempo y entramos en uno de los lugares más impresionantes que he estado en mi vida. A día de hoy sigo sin tener palabras para explicar lo emocionante que era estar allí.
Pasamos toda la mañana allí y después de comer nos fuimos directas a descansar...
Por la tarde fuimos al mirador de San Nicolás recorriendo las enrevesadas y empinadas calles del barrio del Albaicín.
Vistas desde el mirador de San Nicolás |
Por la noche nos dimos un homenaje y fuimos a ver un tablao flamenco al Le Chien Andalou. Muy recomendable!
Estábamos rodeadas de turistas en aquella especie de cueva y el ambiente era una pasada... Una copita de vino blanco, unas tapas y a dormir :)
Al día siguiente cogíamos el coche de alquiler a las 5 de la tarde, así que aprovechamos la mañana para acabar de hacer el centro.
Catedral |
Imprescindibles
Alhambra
Pasear por el Albaicín
Mirador de San Nicolás
Catedral
Capilla real
Tablao flamenco